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La empresa edificará una fábrica de 3.000 metros cuadrados este año para aumentar en un 35 % su producción

l segmento de mercado específico en el que trabaja la firma porriñesa Óptima Cleaning, fármacos veterinarios para el ganado vacuno, le ha permitido crecer en plena crisis económica. De hecho, sus previsiones de producción les han obligado a pensar ya en una ampliación de sus instalaciones en 3.000 metros cuadrados, según apunta José Antonio Redondo, fundador y gerente de la compañía. Redondo señala que la nave en la que trabajan actualmente no les permitirá aumentar en un 35 % la producción, cantidad que estima necesaria para responder a sus clientes.

Tras siete años en el polígono de A Granxa, se queda sin sitio para responder a la demanda de sus clientes. Redondo explica que por este motivo, la compañía invertirá un millón de euros para construir una nueva nave que de cabida a nuevos trabajadores pero, sobre todo, maquinaria automatizada. Abandonarán el espacio en el que trabajan actualmente porque, cuenta Redondo, «se complicaría la labor logística al tener clientes para los que producimos bajo demanda».

De los 3.000 metros cuadrados que buscan, explica el fundador de Óptima Cleaning que solo dedicarán 700 a la zona de producción. Otros 1.600 serían zonas de tránsito y almacén, del que precisan más espacio. El objetivo de Redondo es dejar libre unos 400 metros libres de finca para poder ampliar la fábrica en los próximos años si el crecimiento se mantiene estable.

Según declara el gerente de la compañía, José Antonio Redondo, actualmente cuentan con el diseño 3D de este nuevo espacio, que les permitirá producir un 35 % más según los cálculos de la compañía. El gerente de Óptima Cleaning explica que la ampliación se realizará «sí o sí» este año porque la empresa lo necesita.

Aunque el empresario reconoce lo ambicioso de su plan, espera que puedan tener la nueva fábrica ya montada en septiembre. Prefiere de todos modos no fijarse plazos fijos, «hay que ir despacio para hacer las cosas bien: cuando lleguemos, llegaremos», sentencia. La decisión que tienen tomar ahora es en qué terrenos situarán esta ampliación, y ahí se han encontrado con un problema.

Óptima Cleaning es una empresa englobada en la industria química y farmacéutica. Su producto estrella, explica el empresario, es un fármaco desarrollado en exclusiva que previene la mamitis en las ubres de las vacas. El ganado vacuno se ve expuesto a esta inflamación al ser conectado a las máquinas ordeñadoras, cuenta José Antonio Redondo. También venden un desinfectante para dichas máquinas.

De momento, Redondo no se muestra preocupado por la crisis que se ha implantado en el sector lácteo «el productor tiene que limpiar dos veces al día la máquina», extraiga más o menos cantidad de leche. En su afán de diversificar la oferta de la compañía, durante el 2016 podrá en marcha su línea de producción Diet, que ofrece concentrados vitamínicos y proteicos para la alimentación de los animales, según reflejan las publicaciones de la empresa. Esta ha sido desarrollada los últimos cuatro años por los técnicos de la compañía.

Otra de las ramas de la línea de negocio son los desinfectantes industriales, apunta Redondo. Actualmente suministran a PSA Peugeot-Citroën Vigo el material con el que limpian las máquinas de sus circuitos de trabajo. También tiene un producto detergente para los lavavajillas de los establecimientos hosteleros, que según señala el empresario, creció notablemente durante el pasado verano por las previsiones positivas de consumo del turismo nacional.

Óptima Cleaning lleva en activo en A Granxa de O Porriño desde el 2008. José Antonio Redondo recibió el premio de mejor empresario de la Asociación de Jóvenes Empresarios en el 2014.

La empresa baraja si crecer en O Porriño en terreno privado o comprar en Mos a Xestur suelo público

No son pocas las ofertas de suelo que ha recibido Óptima Cleaning, explica José Antonio Redondo, gerente de la misma. De momento, el empresario señala que «preferimos quedar en O Porriño, porque tenemos más logística y los camiones pasan más con más frecuencia». También por sus empleados, cuenta, pues están acostumbrados a moverse hasta este polígono. Explica el empresario que Xestur le ha ofrecido la venta de suelo en el parque de A Veigadaña, en Mos, pero con un precio «fuera de mercado, por encima del de la iniciativa privada». La situación ahora mismo es, según Redondo, «un tira y afloja». Tienen sobre la mesa la oferta de un banco que les garantizaría no solo la venta del suelo sino también la financiación posterior. También la de varios particulares. De momento la decisión no está tomada. Redondo espera de Xestur una rebaja de precio que sea competitiva con el resto de las ofertas que recibe. En el caso de A Granxa, el precio se sitúa entre los 114 y 126 euros el metro cuadrado. En Mos llega a los 300, por lo que ve difícil una rebaja tan grande. La compañía baraja estas dos opciones. En el caso de ampliarse en el polígono de A Granxa lo haría en la nueva extensión denominada PPI6, una urbanización industrial de inversión privada y autorizada por el Concello de O Porriño. La otra opción es recoger los bártulos e instalarse en el parque industrial de Mos, que patrocina Xestur. Este organismo está aplicando grandes ventajas fiscales a las empresas interesadas en invertir en el área de Vigo para evitar la fuga de capital industrial a los parques empresariales del norte de Portugal, especialmente por parte de empresas dedicadas al sector de la automoción.
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